Bella... de nuevo aqui mi querida Mariposa... fui a tu casa: Michoacán... bello lugar, vengo encantada por Morelia y Patzcuaro... no vi a tus hermanitas... solo dibujadas en mil cosas, en todas partes están presentes, bellas con sus alas extendidas llenas de color... el centro de Morelia es un retablo con vida, comer en los portales frente a la plaza fue un sueño, mirar desde la ventana del hotel la iluminación nocturna de la Catedral... no sabes querida Mariposa... y al amanecer cuando los primeros rayitos de luz tocaban sus torres, un verdadero regalo.Este fue un viaje muy especial porque me invadieron los recuerdos, estar en el aeropuerto, no sabes Mariposa, deseando recibir un mensaje al cel y queriendo enviar también... mirar desde la ventanilla del avión... luego cerrar los ojos y sentir estremecer mi cuerpo por la añoranza... desayunar en el bufet del hotel... caminar por las calles bellas de Morelia... aquella vez fue en otra ciudad, pero la sensación fue igual...
Comimos en un hermoso restaurante de Morelia, en medio de la tertulia empezó un trío a cantar, unas señoras le hicieron coro con gran sentimiento... puse atención a la canción... una canción muy triste Mariposa... siento mucho la situación que vivió quien escribió esa canción para sentirse así... la canción se llama Urge... imaginate mi bella... urge... es un grito desesperado... es una voz que pide auxilio, que tan desesperado puede estar un corazón como para estar urgido de cariño... la canción dice:
Con mi dolor
causando pena voy rodando por ahí
no hay una frase de cariño para mi
todos me miran con desprecio y con rencor
mi corazón está cansado de sufrir
que muchas veces le escucho repetir
estas palabras que me llenan de dolor
urge una persona que me arrulle entre sus brazos,
a quien contarle mis triunfos y mis fracasos,
que me comprenda y que me quite de sufrir
urge que me despierten con un beso enamorado
que me devuelvan el amor que me ha negado
porque también tengo derecho de vivir
urge.....
Con tan pocos versos, cuanto sentimiento de soledad... sabes Mariposa yo también quiero tener a alguien a quien contarle mis triunfos y mis fracasos... de pronto dan ganas de gritar la emoción del gran éxito con alguien que lo gozará mucho porque te ama y te abrazará y dirá que esta orgulloso de tí... y para esos días de derrota... compartirla en unos brazos que arrullen, Mariposa, la frustración es mas ligera... empaticé de pronto con el autor, con el poeta que escribió estos versos, no cabe duda, querida, que no podemos vivir solos, necesitamos ese alguien con quien compratir nuestra vida... no digo urge... por ahora estoy disfrutando esta mágica soledad que me pone al descubierto tantas cosas de mi, me descubro cada día, me sorprendo a mi misma maravillándome de la increible habilidad del ser humano de adaptarse a las situaciones nuevas... Mariposa... este viaje fue muy especial...
